En estos tiempos de recesión y por lo tanto de sobriedad “street food” o “comida callejera” está teniendo cada vez mayor popularidad en el mundo. En Italia actualmente se ha extendido y viene celebrado especialmente en algunos festivales en pueblos, mejor conocidos como “sagre”, varios de ellos dedicados a un platillo o ingrediente especial. Como sabrás, cada Región en Italia tiene sus propias recetas y en consecuencia cada región tiene su propia “comida callejera”. Económica, genuina y deliciosa, estás son las razones por las que italianos y turistas la aman.
En Emilia Romagna por ejemplo puedes probar la “piadina romagnola”, es una especie de tortilla de harina mexicana rellena con los ingredientes que desees (normalmente queso y jamón).
Florencia es famoso por su “panino col lampredotto“, es un pan con el estómago de la res previamente cocido y picado, enriquecido con una salsa verde a base de perejil, la sal, pimienta y picante se agregan al gusto del cliente… Simplemente delicioso.
Livorno tiene la famosa “cecina“, a base de harina de garbanzo servido rigorosamente en “schiacciata”.
Si te encuentras en Roma debes probar el “supplì“, son unas bolitas de arroz con un relleno de mozzarella y salsa de tomate, empanizadas y fritas.
En Napoles la primera pizza fue servida dos siglos atrás probablemente como “comida callejera” y es una de las razones por las que la pizza se convirtió tan popular en el resto del mundo.
En algunas regiones del sur en ciertos mercados y ferias puedes encontrar el “mussu” (rebanadas de cerdo cocido y cara de ternera con limón y aceite de oliva)
Y ya que hablamos del Sur no podemos dejar de hablar de la “comida callejera” en Palermo, empezamos con sus famosas “panelle” (es una pasta a base de harina de garbanzo frita y cortada en cuadros que se meten en un pan) y crocchè (croquetas de papa empanizadas y fritas) y que decir de los “arancini” que son unas bolas de arroz con azafrán rellenas de ragù con chicharos, pollo con zanahoria y chicharos, espinacas o las clásicas con mantequilla.
Y si de apetito se trata no dejen de probar las “stigghiole” que son unas brochetas a base de intestino de cordero o cabra con cebolla y perejil; y para terminar no puedo dejar de mencionar el delicioso “panino con la milza” que no es otra cosa que un bollo con el bazo del estómago de res…
Si vienes a Italia no dejes de probar todas estas delicias locales.
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